De nada sirve engañarnos, estamos pasando una situación complicada, una época que muy pocos podían imaginar. Pero por complicada que sea la cosa, lejos debemos estar de tirar la toalla, sino que por el contrario debemos mantenernos alerta y adaptarnos a la circunstancia, en pos de que todo mejore lo más pronto posible.
Ante todo mantengamos la calma. Entiendo que el alarmismo de los medios de comunicación y las redes sociales, sumado a la falta de información hacen que las cosas se vean feas; pero la histeria y el pánico son los peores consejeros en momentos como estos; nos empujan a cometer una serie actos irracionales generando una bola de nieve incontrolable capaz de aplastarnos o arrastrarnos directamente a un desastre aún peor.
Seguramente ya estamos cansados de escuchar sobre este virus que nos atormenta, pero no está demás recordar algunos puntos claves:
La gran mayoría de las personas jóvenes y con un buen sistema inmunitario no tendrán muchos problemas para superar la enfermedad generada por el COVID19, a pesar que estos pueden llegar a ser graves; es más según los expertos la mayoría (cerca del 90%) pasaría el virus de manera asintomática. Igualmente, esto no excluye de complicaciones importantes en algunos casos en gente joven; pero no serían la norma.
El problema real está en la posibilidad de colapsar el sistema sanitario del país si no se toman medidas para frenar la curva de nuevos casos. Curva que ya hemos visto por todos los rincones de la casa. O sea en forma directa o indirecta podemos terminar dañados por este virus, por más sano y fuerte que nos consideremos y aunque no le temamos al virus (o no creamos en él, como he visto muchos por ahí) no estamos libres de sufrir un accidente.
Listo, ya con estos dos puntos bien claros, podemos adentrarnos en el tema que hoy en día nos toca vivir, nada menos que el aislamiento social; o como comúnmente lo llamamos, la cuarentena. Es interesante ver por redes sociales como lo mas atormentador termina siendo este asunto de vivir encerrados. De repente nos encontramos conviviendo con nuestras parejas, con nuestros hijos y con nosotros mismos. Muchos no saben como lidiar con esto y terminan desesperados. Aquí voy dejando algunos tips que podemos ir aplicando mientras salimos de esta.
Hoy propongo que aprovechemos esta posibilidad de tener mucho tiempo para reflexionar aprovechando el tan temido ABURRIMIENTO para ver claramente el camino que hemos andando hacia nuestro presente. Reflexionar si lo que hemos construido durante todo este trayecto de nuestras vidas realmente nos trajo calma, paz y alegría, al fin y al cabo era el objetivo principal de nuestras acciones ¿o no?
Si te das cuenta que no pudiste alcanzar alguno objetivos, peor aún si consideras que estas muy lejos, realmente es una oportunidad de crecer como persona, de entender que estábamos errando el camino. Quizás estábamos viviendo distraídos y ocupados lejos de nosotros mismos. Quizás nos estábamos dejamos llenar los ojos por los adornos del mundo moderno que brillan y no ofrecen nada importante en realidad, resultando ser mas que un mero ADORNO. ¿Cómo es posible que nuestra propia existencia nos resulte poco interesante? ¿No será que no nos queremos a nosotros mismos? ¿Qué tan desesperante puede ser estar con nuestra pareja todo el día? ¿Realmente nos gusta? ¿Tan aburrido es ver crecer a tus hijos, o será que realmente tampoco te gustan? En fin aprovechemos este tiempo para respirar tranquilo, afirmarnos bien con los pies sobre la tierra, sin intermediarios, sin luces de colores y crecer desde lo mental.
Con el correr de los días voy a ir aprovechando este espacio para ir publicando algunas otras ideas para volver a las calles mas fuertes desde todo punto de vista. Mientras, seguimos moviéndonos y entrenando; si necesitas una mano con este punto espero tu mensaje en mi Instagram para ir guiándote con ejercicios y movimientos adaptados a tu nivel y con los accesorios que tengas en tu casa. Recuerda, el ejercicio es un estrés para el cuerpo y como todo depende la dosis para hacernos más fuerte o debilitarnos, si nunca entrenaste, es el momento para empezar pero no te pases de rosca o vas a terminar bajando la guardia de tu sistema inmune.